miércoles, 7 de octubre de 2015

Cómo empecé con el peligroso "Internet".


Hola queridos lectores. ¿Qué tal? ¿Bien? Bueno, imaginaré que esto es un diálogo y me habéis dicho "sí, muy bien Omar, ¿y tú que tal?". Yo bien, gracias. Aquí, escribiendo la entrada semanal.

Bien. Hecha la salutación, hoy me dispongo a hablar de mis primeros pasos en la red. Soy consciente de mi huella digital, y que muchas cosas son imborrables. Algunas de ellas perdurarán en la memoria de muchas personas, otras solo de mis amigos, y otras solo las conocen el FBI, CNI, CIA, y otros entes que controlan 4chan et al.


En aquella época, yo con mi ingenuidad, apenas me conectaba para jugar con la web del Club Super3 y revisar mi correo en el Xtec una vez al mes. En aquella época se hacía lo típico de enviarse mensajes con gente de otros colegios para mejorar la escritura de "cartas". Yo concretamente me escribía con una niña. No me preguntéis cómo se llamaba. En aquella época no era mucho mejor que ahora en lo que a ligar se trata.


Todo empezó nací. Mi familia vivía en una calle de la periferia, y en una esquina de la calle había una tienda de informática. Hablo de 1992-1998. Por aquel entonces la informática no era tan accesible para todo el mundo tal y como la conocemos ahora. Siempre que pasaba por delante me llamaban la atención los muñequitos de esqueletos que tenían en el aparador. Nunca supe qué eran. En casa no teníamos ordenador por aquel entonces, y a mí las consolas como la Supernintendo me parecían la cima de la tecnología a la que la humanidad aspiraba.

Más o menos por el año 97, en clase empezamos a usar algún ordenador para los típicos juegos de niños, puzles y demás. Yo ya me sentía afortunado de poder usar semejante artilugio porque solo había uno en el colegio. Un Windows95.

Luego, con la llegada del Windows 98, el colegio consiguió más ordenadores, y junto con una sala llena de miniordenadores basados en el "GEM Systems TOAM" que no tengo ni idea de lo que es pero básicamente lo usábamos para hacer mates; conseguí más práctica en el uso de estos aparatos.

Por allá el año 2000, mi padre, viendo que el mundo avanzaba cada vez más hacia una época en la que los ordenadores dominarían el mundo, además de popularizarse en mi casa el uso del teléfono móvil, compró un ordenador. Un Windows98 de segunda mano, que se conectaba a la línea de teléfono y básicamente, después de un ruido característico, se conectaba a internet, pagando por tiempo conectado. 

Tiempo después gané más facilidad a la hora de usar el PC, y empecé a jugar en línea. Con juga en línea me refiero a Habbo, o Minijuegos, pero en el colegio. En casa pagar por internet era excepcional.

Al cabo del tiempo, y aun en el colegio, mi padre decidió que una tarifa plana no nos vendría mal. Y así fue como nos la instalaron en casa. Eso sí, era o hablar por teléfono, o usar internet. Las dos cosas a la vez no se podían hacer.

Ya en 1ero de la ESO, viendo que Windows98 había quedado un poco desfasado, mi padre compró un WindowsXP. Un ordenadorazo en aquella época que podía correr hasta el FIFA2003, una pasada. Fue entonces cuando empezó todo.

Unos compañeros de clase me explicaban que se bajaban capítulos de Dragon Ball desde un programa llamado "Emule", y como en aquella época era joven y alocado, pues me lo bajé, aprendí a usarlo, descubrí el "Ares", el Messenger ya existía, luego vino el Fotolog (ahora ya es momento de que os empiece a dar un poco de vergüencita lo que subíais), Tuenti... Hasta que llegó YouTube.

Yo me enteré de su existencia allá por el año 2006. Y no tardé demasiado en hacerme una cuenta. El primer vídeo que subí era uno que me había bajado del mismo YouTube. Ciertamente robando material de otros, pero en esa época a nadie parecía importarle. En pleno "boom" de internet, a la gente no le importaba qué había en YouTube si no cuánto contenido era capaz de subir la gente. Aún éramos inocentes todos.

Internet siguió creciendo y en casa, cuando se estropeaba el ordenador había verdaderos dramas. Mi madre impresionada con poder hablar con su familia a cientos de kilómetros de distancia por Webcam, yo contento bajando cosas del Ares y troleando por Messenger, y mi hermana con sus cosas de adolescente. A mi padre no le parecía interesar demasiado en aquella época, pero supongo que le gustaba vernos disfrutándolo.


Y hasta aquí mis inicios en la red. Todos hemos tenido un principio en internet, y la verdad, no niego que me asusta pensar hasta qué punto puede llegar el progreso tecnológico en este sentido. ¿Cómo fue vuestro inicio en la red? Ya si eso, si tenéis ganas me lo contáis, que será interesante compartir una experiencia así.