domingo, 5 de junio de 2016

Parte II: “Mi punto” – 5to concurso de cortos contra las drogas


 Cuando escribí esta entrada hace un mes y poco, para explicar el porqué del vídeo, dije textualmente “El objetivo de este vídeo no es ganar. Ni tan solo es aprender a grabar ni a editar.  El objetivo principal de mi última participación en ese concurso es quejarme de la bazofia sin sentido que se hace una vez y otra, para concienciar a los jóvenes que no se droguen. Lo hace gente que no tiene ni idea de por qué se drogan ni qué son las drogas realmente, y pretenden explicar a alguien que sí sabe lo que son las drogas (parcialmente), qué creen ellos que son las drogas.”

No me lo explico aún, pero hemos ganado el 4arto premio del concurso. El jurado ha considerado que el vídeo es el 4arto mejor de 118 cortos presentados. Un vídeo en el que nos metemos directamente con el jurado, en el que criticamos todos aquellos vídeos que se hacen siempre, y en el que educamos. Sí, educamos, y no de forma obvia, sino con mensajes subliminales (Esteve, el actor que hace la referencia del azúcar glas como cocaína, no está comiendo un triángulo de chocolate porque sí).

Victor tampoco hace de presentador obsesionado con ganar porque sí, lo hace para criticar el sistema de competición del propio concurso.

Oscar no hace el papel de persona de fundamentos teóricos fuertes porque sí. Lo hace porque ciertamente la teoría es necesaria, pero si se abusa, acaba aberrando el propio contenido.

Josep no hace el papel de persona que pretende infundir miedo para evitar el consumo de drogas, lo hace porque es de los recursos más habituales.

Don Jara no hace el papel de persona cuyas ideas son ignoradas porque sí. Lo hace porque es lo que pasa cuando de tantos participantes, solo unos con unas ideas determinadas son elegidos, mientras que los otros pueden tener grandes ideas y ser ignorados.

Didac no hace el papel de persona cuya intención es educar porque sí. Lo hace porque esa es la basa en la que se debería centrar todo vídeo pese a los edulcorantes que luego se le añadan.

Incluso yo, no hago el papel de bedel con ganas de que acaben de hacer el vídeo ya porque sí. Lo hago porque en ocasiones, nos centramos tanto en cómo hacer algo, que se nos olvida el objetivo por el cual lo hacemos.

Dicho todo esto he de confesar algo. Hace dos meses dije una frase que me salió del alma, y es que estoy acostumbrado a perder. Un ejemplo claro es este concurso de cortos, en el que me he presentado cuatro años seguidos con la ilusión por las nubes y la hostia siempre ha sido importante. Este año no tenía expectativas. Lo primero que hice al hablar con las personas que después de preguntar en Facebook, se ofrecieron de forma totalmente altruista a ayudarme, fue “mirad, el objetivo no es para nada ganar, sino criticar al concurso y los vídeos que se presentan en él”, y esto os lo puede corroborar cualquiera de ellos, e incluso las personas que vieron el guion previo (que llevo escribiendo desde noviembre pasado), y los que han visto el vídeo durante la postproducción.

Yo ya no quería ganar, quería destrozar los registros y que el jurado que lo viese se sintiese tan ofendido e increpado, que me deseasen lo peor. Quería además que el resto de compañeras y compañeros que presentan vídeos al concurso se diesen cuenta al ver el vídeo que los enfoques de siempre ya no valen. Hay que cambiar la forma de pensar.

Pero si quería algo por encima de todo, era, es y será nunca fallar a mi estilo. Mi estilo casero, con algún chistecillo, juegos de palabras y bromichuelas que saquen una sonrisa a quien lo vea más allá del contenido del propio vídeo. Uno nunca puede defraudarse a sí mismo, y creo que esa es la verdadera clave de que esté tan y tan satisfecho por este 4arto premio.

No es un 1ero, ni un 2do, ni un 3ero, pero para mí, es el más glorioso de los premios que hemos conseguido estos dos meses (Subcampeones de la Liga de Debate (Cataluña Valencia y Baleares), 3er premio en el festival de cortos de Temps de Flors (Girona), 2do premio en el concurso de relatos cortos contra la desigualdad de género (UdG) y 4art premio en el Concurso de Cortos contra las drogas de TuPunto (territorio español).

“¡Deja de ganar cosas ya, puto pesado!”.

Ya que estoy, aprovecho para dar las gracias a todos. No creo que hubiese una mejor manera de cerrar mi etapa universitaria, y hubiese sido imposible sin tanta gente magnífica. Yo nunca he creído que tenga ninguna habilidad especial, así que quieras o no, y los que me conocen lo saben, estos premios los he ganado porque he participado con gente genuina en sus campos. Muchas gracias a todos ellos y ya dejo de dar la brasa con tanto premio y tanta cosa, que me empiezo a dar asco.