lunes, 4 de julio de 2016

Alí Babá, el ISIS y la indiferencia occidental VI

Esta semana toca hacer la sexta parte de estas entradas relacionadas con el DAESH o el autodenominado “Estado Islámico” porque han pasado muchas cosas que merece la pena mencionar. Siempre digo lo mismo, pero ojalá no tuviese que escribir más sobre el tema, pero vamos, que ninguna noticia relacionada con este grupo de infraseres merece más relevancia que otra principalmente porque todo lo que estos anormales hacen es matar, violar, mutilar y torturar a humanos, ya sean hombres, mujeres, niños, cristianos, musulmanes, judíos, chiitas o sunnitas.

Podríamos empezar hablando del terrorista de Orlando que entró a un recinto festivo donde habituaba gente gay, y masacró a todo ser viviente en nombre del ISIS, pero eso en definitiva solo es un ataque terrorista más de la larga lista que han sucedido desde los atentados en París, aunque en la prensa no se haga difusión porque claro, la mayoría pasan en Siria o Irak, y ahí apenas nos importa a los occidentales, ¿no?

El atentado de Orlando fue perpetrado por un terrorista con el pretexto que la gente gay es pecadora y por lo tanto han de morir, pero ¿no somos acaso todos pecadores a ojos del ISIS? ¿Qué tipo de argumento es ese? Pues muy sencillo. Es el argumento del terror. Dice entre líneas “temednos cada segundo de vuestra vida, pues cada detalle insignificante de vuestro día a día puede ser destruido por gente como nosotros”. Esa es la idea de atacar colectivos como el gay, el judío, revistas como la de Charlie Hebdo, o discotecas como la Bataclan. Y está llegando el mensaje a la sociedad. Prueba de ello es el surgimiento de fuerzas de extrema derecha en Europa, el Brexit, o el olvido que hay ahora en los medios de comunicación en referencia a los refugiados.

“Sí, se ve que cada vez está menos de moda”

Pero hablemos de más atentados. El ISIS ha atacado Turquía unas cuantas veces en lo que va de año, con más de doscientas víctimas mortales. Claro que Turquía no es un país de la Unión Europea, y como mucho se puede resentir el precio del kebab. No pasa nada, ya están acostumbrados.

“Pero ¿¡qué!? ¡SÍ SON VIDAS HUMANAS!”

También ha habido un par de atentados con coche bomba en Siria, pero bueno, esos están en guerra. Nada nada, pasa página del diario, que el deporte lo ponen al final y hoy hablan de fichajes.

“Esto es una broma de muy mal gusto Omar, no todos somos así…”

Ah, mira, en las noticias han dicho no sé qué de un atentado con coche bomba en un mercado de Bagdad, ciento y pico muertos. Ostras, y Del Bosque y Casillas peleados, eso sí que me interesa.

“Cuánto cinismo…”

Perdonad mis comentarios asquerosamente deleznables. Os voy a hacer una pequeña sinopsis de por qué el ISIS está atacando de ese modo y causando los muertos que causa en zonas céntricas de ciudades muy pobladas. De hecho, supongo que con deciros un par de frases, entenderéis el motivo.
Al autodenominado Estado Islámico le quedan los días contados. Con la recuperación de Faluya, el ISIS se ve acorralado en Mosul, y en territorio sirio, solo le queda el bastión de Raqqa, y zonas del norte en su conexión con las afueras de Alepo. Imaginad como han de estar de desesperados, que dicen haber atacado una mezquita de Arabia Saudí (uno de sus presuntos aliados o si más no, no enemigos) en la víspera del último día del Ramadán. Y su objetivo no es solo matar, sino crear el caos y el terror. Otro ejemplo es el atentado en el aeropuerto de Estambul el día después de que Turquía e Israel reabriesen negociaciones comerciales, y el día antes que Turquía las reabriese también con Rusia.

Claro que todo esto no lo encontraréis en las noticias. Vamos al fútbol que es lo que interesa.

Nota 1: Escribo esto la noche antes de publicar la entrada. Se ve que una comisión de investigación británica ha concluido que resulta que no había suficientes motivos para invadir Irak matando a centenares de miles de iraquies. Más o menos 15 años después, y cuando aún son visibles los estragos de esa guerra, tanto ahí como en todo el mundo con actos terroristas, y la cárcel de Guantanamo donde se encarcelaron iraquies, sigue abierta. Centenares de miles de muertos. Centenares de miles de personas muertas. Bush, Aznar y Blair.